lunes, 14 de enero de 2013

La historia de Jonás - M.L.C.

Dios escogió a Jonás
para contra Nínive pregonar
porque el pueblo de allí
estaba lleno de maldad.
Jonás huyó a bien lejos
de la presencia de Dios
porque él tenía miedo
a aquél pueblo predicar.
La nave en que iba Jonás
empezó a estallar
porque Dios hizo levantar
un gran viento en el mar;
y los marineros temerosos
descubrieron la verdad
y echaron Jonás a las aguas
profundas y oscuras del mar.
Dios proveyó un gran pez
para a Jonás tragar
y él en su vientre pasó
tres días y tres noches a clamar.
Dios oyó su clamor
y al pez le ordenó
que echase Jonás a la tierra
y el pez le obedeció.
Jonás se volvió a Nínive
y al pueblo su mensaje dió
el pueblo se arrepintió
y a todos el Señor salvó.
Jonás se enojó grandemente
y hasta la muerte pidió
porque Dios perdonó a aquél pueblo
que según él, no lo mereció.
Saliendo Jonás de la ciudad
una enramada preparó
y allí, debajo de ella
Jonás se acostó.
Dios preparó una calabacera
para su cabeza cubrir
y Jonás agradecido
volvió a sonreír.
Pero al venir el alba del día
un gusano Dios preparó
y aquella calabacera
en un instante se secó.
Jonás muy triste decía
mejor para mí es morir
porque ahora la calabacera
ya no me puede cubrir.
Dios dijo entonces a Jonás:
¿Te enojas porque destruí,
una simple calabacera,
que hago nacer o morir?
¿No tendré yo piedad
de aquel pueblo de allí
donde hay 120 mil personas
que el mal del bien
no saben discernir?
Yo soy un Dios poderoso
lleno de misericordia y amor
quién renuncia al pecado
para mí es que tiene valor.
Yo tengo un pueblo escogido
y santificado también
para conmigo gobernar
y vivir en mi reino,
¡Amén!